Corre, corre, corre

Cuanto tiempo llevaba sin pasarme por aqui para dejar mis pensamientos, y es que con tanto meneo que hemos tenido últimamente con la champions y la euroliga, bones, mentes criminales y el mentalista, junto con la escapada del fin de semana a Las Palmas, donde no tengo internet, había dejado abandonado este blog.

Pero ya estamos por aqui nuevamente, después de haberme pagado una paliza esta misma mañana haciendo 18 km por la ciudad, vaciando la cabeza y recargando pilas para el mes que se avecina en Tenerife, porque hasta semana santa no vuelvo para mi isla.

Reconozco una cosa, cuando iba corriendo esta mañana y sobre las 9:00 am pasé por Las Canteras, casi se me saltan las lágrimas y es que imágenes como las que ví con la marea vacía, la barra de fondo y la arena rubia lisa, esperando a ser estrenada, me llenó el cuerpo de sensaciones que sólo un marco como ese podría haber hecho.

Del resto de la carrera, lo mejor, que los domingos por la mañana seguimos siendo pocos los que madrugamos para hacer deporte, o simplemente madrugar. Me gusta ver a la gente hacer deporte, caminar, disfrutar de las cosas maravillosas que tiene la ciudad.

Correr es mi manera de encontrar soluciones o simplemente de pasar un tiempo sin tener que pensar en otra cosa que en dar una zancada tras otra, y llegar un momento en donde en lo único que piensas es en respirar y en tirar de las piernas para llegar un poco más lejos.

Pero cuando todo eso pasa queda el regusto de parar el crono, beber un poco de agua, y ver como cada día llegas un poco más lejos, sale la sonrisa sola y piensas que el próximo día puedes llegar aún más lejos.

Desde aquí animo a todo el mundo a que corra un poco, lo que sea, correr-caminar, volver a correr, como una manera de ponerse en forma y además como una manera de conocerse a sí mismo, saber donde están los límites y sobre todo, y es lo que más me gusta a mi, porque olvidas lo malo y piensas en lo bueno!

Ponte en marcha, corre...

Yo por ti, ¿tu por mi?

Cuando entrenaba a baloncesto, tanto como jugador y después como entrenador, me enseñaban o ponía enfasis en el equipo, en remar para el mismo sitio y conseguir lo que nos propusieramos, ¿porque?

Por que cuando uno juega en equipo, las ayudas y la solidaridad de unos con otros, permitía que se pudiera llegar más lejos, poder ganar partidos, conseguir los objetivos que se porponía en conjunto,superar adversarios mucho más duros y difíciles, en definitiva, romper barreras, superación!

Son principios que uno aplica también en su día a día, en lo personal y en lo profesional, y en esta segunda parte de la vida, donde curiosamente nos pasamos más del 75% de la vida, la solidaridad con los compañeros y gente que puedas tener a tu cargo debe ser aún mayor.

Siempre he dicho que si uno está contento en su trabajo no busca que le paguen más dinero, aunque nunca hay que decir que no, pero sino que se le recompense con otros valores, días libres, reconocimiento, algo que haga crecer el ego del trabajador, que se sienta valorado, porque lo que se consigue es aumentar su ritmo de trabajo, y por ende, la productividad en el tiempo que pasan realizando su trabajo.

Pero cuando el empresario, el jefe, o como lo quieran llamar, olvida que el mejor activo de su empresa son sus trabajadores, sus trabajadores motivados e implicados, los que no lo están restan en el resultado global, empiezan a perder parte de los buenos resultados de la empresa, sobre todo cuando los trabajadores dan por tí, pero no hay en la dirección contraria, en ese momento empiezan las situaciones, digamos, extrañas, y cada vez el rendimiento disminuye, incluso de forma inconsciente.

Yo por ti - Tu por mi, que quede claro, no sólo se es solidario por ser socio de una ONG.